martes, 6 de septiembre de 2011

Vuelta al curre, vuelta a la realidad, vuelta al chino.

Son las tres de la mañana. Ayer fue el primer día de trabajo, tras las vacaciones, para la mayor parte de la gente que tiene trabajo en este curioso país cada día más desnortado. Y por si alguno se pensaba que este otoño iba a ser “Bambi” (nombre que postulo con gran ilusión para algún huracán cuando toque la “be”),  se acaba de ir Irene, llega Katia, con K de Krisis, y el pánico por las borrascosas tormentas que se avecinan ya se ha dejado sentir en las bolsas, en los discursos demagógicos y en las conversaciones atribuladas del personal.

Mañana, cuando económicamente nos duchemos, veremos cómo ese morenito que tanto nos ha costado pillar, se colará por la tubería más deprisa que cualquier otro año, y es que la vuelta a la realidad de este septiembre de 2011, ni es lírica ni es el arma cargada de futuro con que te apunto al pecho, de Celaya, más bien es un café con mala leche de esos que revuelven el estómago y soliviantan el colón hasta su más vertiginosa insurrección.

Releo los titulares de los principales periódicos y no sé si 1) debo meter la cabeza en la cisterna; o bien, 2) raparme el pelo, vestirme de naranja y cantar el Hare Christmas* en la Puerta del Sol,  con mrindamga y crótalos —lo bien hecho, bien parece—; a falta de 3) infraestructuras que me aseguren la victoria en el asalto de los palacios de invierno.

Y si no me creen, lean algunas muestras:

Vuelve el pánico: las primas se disparan, la banca se hunde y arrastra a las bolsas. El confidencial 
El miedo a la quiebra de Grecia hunde las Bolsas y dispara la prima de riesgo. El País 
Nuevo derrumbe de las bolsas por los temores a otra recesión. El mundo
La alerta de recesión hunde los mercados. La razón

Y los catalanes a su rollo: "El govern aprueba este martes el recurso contra el TSJC" (La vanguardia), aunque lo mejor de la portada catalana, lo mejor de todas las portadas, llas declaraciones de Dyango: Antes la mujer argentina me gustaba más, ahora la española ha ganado mucho” 

 ¡Nossa Senhora da Santa Conceição Aparecida!, ¡Nooosssssaaaaa!
¡Ya puedo dejar los lexatines!¡Ya puedo morir tranquila!

Hablando de dejar y de morir, vamos a dejarlo aquí, y el que quiera que se muera de aburrimiento hablando de economía y otras mentiras, que yo, como León Felipe, no he venido aquí a hacer dormir a nadie, sino a reírme de la humorada con que cada día me soprende la ducha diaria. Esta vez, comprando en el chino. ¡Qué grande, qué grande!



* Término con que CHC, con mucho convencimiento, denomina al mantra Hare Krishna, y que yo adopté para mi repertorio léxico desde le primer momento que lo oí, porque… ¡Por favor!, ¿dónde va a parar el lirismo floral del Christmas frente a la parquedad del dios hindú? ¡No hay color! ¡No hay color!

1 comentario:

  1. Los chinos tienen cosas formidables, para muestra ....

    http://dungeonofarthur.blogspot.com/2011/02/imitaciones-cutres-del-chino.html

    http://chinacalidadyglamour.blogspot.com

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